Tres años y medio después de su retirada, Ruth Beitia sigue superando listones. La atleta cántabra ha conocido hoy que el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) ha desestimado parcialmente el recurso de casación de la rusa Svetlana Shkolina, tercera en la altura de los Juegos de Londres 2012 y campeona mundial un año después en Moscú.
La descalificación por dopaje de Shkolina beneficia por partida doble a la española, que sube a su segundo podio olímpico cinco años después de su histórico oro en Río 2016.
Beitia había sido inicialmente cuarta con dos metros en una prueba en la que se impuso la rusa Anna Chicherova -también sancionada por dopaje en Pekín 2008 y Berlín 2009- con 2,05 por delante de la estadounidense Brigetta Barrett con 2,03 y Shkolina con la misma altura.