La mal vista tradición del grito de “Ehh… ¡P…!” nació en el torneo preolímpico rumbo a Atenas 2004 y 17 años después ha provocado que México a juegue parte de la eliminatoria mundialista a puerta cerrada.
El improperio homofóbico por el que la FIFA castigó el viernes a la selección mexicana l con dos encuentros sin público, y a la Federación Mexicana de Futbol (FMF) con $65,000, tuvo varios brotes pero fue ligado al Tricolor por primera vez en el Torneo de Clasificación a los Juegos Olímpicos de Atenas, que se jugó en Guadalajara.
En esa justa, que la selección mexicana se llevó venciendo a Costa Rica en la final, marcó el inició del acto que hoy tiene en jaque a la FMF y al cuadro Tricolor ya que puede afectar su camino rumbo al Mundial de Qatar 2022.
A pesar de que el grito se dio antes en otros escenarios en México, como los ligados al futbol americano colegial, fue hasta el 2004 cuando el ritual terminó en la grosería que ha sido reprobada la FIFA.